La ONU deshonra a la mujer por Anne Bayefsky Las mujeres musulmanas aparecen en las noticias por todas partes – es decir, en todas partes excepto en Naciones Unidas. La principal agencia de la ONU responsable de la promoción y la protección de los derechos de la mujer en todo el mundo, la Comisión del Estatus de la Mujer (CSW), finalizaba su quincuagésimo primera sesión el 9 de marzo de 2007 criticando exclusivamente a un estado -- Israel. La misma semana en que la Comisión se centraba específicamente en el estado de Israel en exclusiva, 33 mujeres musulmanas involucradas en una concentración pacífica en los exteriores de un tribunal de justicia de Teherán eran súbitamente detenidas bajo cargos de poner en peligro la seguridad nacional. ¿Su objetivo? Poner fin a la poligamia y a las leyes de custodia infantil que en Irán privan a la madre del derecho a criar y proteger a sus propios hijos. El 8 de marzo -- el Día Internacional de la Mujer -- 700 activistas feministas se reunían de nuevo en los exteriores del edificio del parlamento de Teherán, exigiendo juicios justos para las mujeres encarceladas unos cuantos días antes. Las fuerzas iraníes de seguridad y efectivos de la policía caían en picado porra en mano sobre las mujeres una vez más, obligándolas a retroceder con fuerza física, obscenidades verbales y amenazas de lo que estaba por llegar . En Arabia Saudí, durante la primera semana de marzo, una niña de 19 años era secuestrada a punta de navaja, violada colectivamente y después apaleada por su hermano, por haberse permitido ser víctima de una violación que la ha condenado a 90 latigazos. ¿Su crimen? Reunirse con un joven que no era miembro familiar en público. En la práctica, uno de sus jueces dijo a esta joven mujer que tenía suerte de no haber sido condenada a penas de cárcel. Pero en la ONU, la Comisión de Derechos de la Mujer adoptaba una resolución específica de un país en exclusiva sobre los derechos de las mujeres palestinas. Aparentemente, los miembros habían pasado por alto los titulares sobre las detenciones en Teherán y la adolescente de Riyadh, emblemáticos de los sistemas legales construidos sobre la discriminación sistemática y grotesca contra la mujer. Tampoco lograron notar los millones de mujeres y niñas vulnerables violadas, desplazadas, asesinadas o en sus últimos momentos en Sudán, los millones de mujeres víctimas de abortos forzosos en China, o las miles asesinadas u obligadas a cometer suicidio por el crimen de deshonrar a sus padres y hermanos por todo el mundo árabe y musulmán. La resolución sobre las injusticias que impone la ocupación de Palestina a las mujeres palestinas fue aprobada mediante votación de 40 a 2. El representante palestino ante la ONU daba las gracias a aquellos que han votado a favor de la resolución, especialmente al Grupo de los 77 -- China y los países en vías de desarrollo -- ejemplos todos de los derechos humanos y la igualdad de la mujer. Alemania, hablando en representación de la Unión Europea, ofrecía una explicación de un minuto excusando su voto afirmativo, mascullando que expresamos nuestra profunda preocupación por el impacto sobre todas las mujeres en la región, incluyendo las mujeres israelíes. (No se molestaron en que tal lenguaje fuera insertado en la propia resolución). Durante 60 segundos, el representante del país que asesinó a millones de mujeres y niñas judías en masa no hace mucho tomaba nota de nuevo de las madres e hijas judías que han caído víctimas del terrorismo en el estado judío. Esta es la corrupción moral que alimenta la ONU dentro de democracias como Alemania. En una institución encabezada por la Organización de la Conferencia Islámica, la Unión Europea se lamenta mientras los verdaderos violadores de los derechos humanos animan. Solamente Estados Unidos y Canadá confrontaron la maniobra como lo que era: el secuestro de otra entidad de la ONU más para volver a la opinión mundial contra Israel y a favor de la Autoridad Palestina. No importa que la Autoridad Palestina sea la entidad gobernante de un supuesto estado cuyos líderes animan a hombres y mujeres a encerrar sus cuerpos en explosivos con el fin de inmolarse y mandarse al otro barrio a ellos y a incontables inocentes civiles. En el 2003, Hiba Daraghmeh, palestina de 19 años, accionaba un cinturón lleno de explosivos que estaba adosado a su cintura, matándose ella y a tres israelíes, e hiriendo a otros 93 en un centro comercial del norte de Israel. Ella es enarbolada como ejemplo islámico -- nunca se reunió con chicos en público, ni siquiera bebía té en la cafetería de su Universidad. En la práctica, la primera vez que el mundo vio su joven rostro sin velo fue en el póster que la Jihad Islámica comercializaba tras su muerte. El terrorismo suicida femenino es la única forma de igualdad de sexos que no molesta a la Autoridad Palestina, y la única que la Comisión de la ONU sobre el Estatus de la Mujer no mencionará. Anne Bayefsky es doctora en Derecho Internacional magna et suma cum laude por las universidades de Toronto y Oxford (la primera mujer en lograrlo) y es un miembro distinguido del Hudson Institute, el Instituto Hoover y la Fundación para la Defensa de las Democracias.